cantaraveus 002 Italia 2018 collaborating with Ahava Noham Katzin

 

Segunda edición de esta serie de performances, precedida por ‘cantaraveus 001 De Madrid a Donostia, pasando por Roma’ seguida de ‘cantaraveus 003 ArtNit Campos 2018’ y otras que ya están de camino.

‘cantaraveus’ es una invasión sonora momentánea, llenar de voz, vibración y sensaciones un espacio, conectando con el resto de seres de ese espacio mediante la vibración y el sonido, transformándose en un abrazo sonoro íntimo y cercano.
Cuestiona los cánones establecidos en el cante, las actuaciones en público y las creaciones artísticas en general. Además, busca la aceptación de cualquier tipo de creación artística realizada por todo tipo de personas. Por ejemplo, las que pueden hacer quienes no tienen facilidades innatas, o nunca han estudiado arte, o tienen una visión diferente de lo bello, o simplemente no quieren imitar las tendencias aceptadas por la sociedad. Este proyecto defiende la diversidad y la aceptación de las personas que crean de forma distinta, sea a causa de su talento divergente, o de algún tipo de diferencialidad cognitiva.
Cualquier individuo, sea o no artista, tiene la posibilidad de crear libremente

Es una obra apta para cualquier público pero se dirige especialmente a las personas que desean expresarse sin miedo a ser juzgadas por el modo en que lo hacen. En definitiva, puede ser disfrutada por cualquier persona que piense que el arte no debería estar encorsetado por un lugar, un marco, o un tiempo, y que se puede hacer en cualquier lugar cómo y cuándo quiera.

Esta forma de expresión nació en Madrid, en Tabacalera, de forma espontánea y sin prever que derivaría en lo que es ahora mismo (un proyecto que ha ayudado a personas a sentirse más libres y seguras en el que han participado personas desde 20 a 70 años, de Italia, Israel y España). Cuando entré en esta sala en la que había una instalación de arte sonoro, pensé que debía grabar lo que iba a hacer, puse el móvil a grabar e hice la primera acción, me pareció muy divertido y me sentí muy bien haciéndolo, en la misma Tabacalera, poco después, grabé más cantos junto a otras obras de arte, como podemos ver en el vídeo ‘cantaraveus 001’ y desde ese momento, son muchísimos los beneficios y sentimientos que he experimentado con estos cantos libres.
La primera intención fue lúdica y más tarde, descubrí que se escondían muchas sensaciones detrás de esta cosa aparentemente sencilla.
El sentimiento principal que descubrí fue mi sorpresa al ver cómo mi voz llenaba cada espacio, llegaba hasta todas las paredes, el techo y las otras salas, incluso las ondas volvían a rebotar en mi cuerpo.
Más tarde, después de cantar junto a las obras de Richard Serra, me hizo pensar sobre la forma en que estaba introduciendo mi arte en un museo sin que me hubieran invitado a hacerlo allí. Entonces, ¿puedo poner en mi currículum artístico que he realizado una intervención en el Museo Reina Sofía de Madrid?
También me hizo cuestionarme ¿qué pensarán las personas encargadas de la seguridad de la sala cuando me vean o me escuchen hacer esto?

Desde la primera vez en la que tuve el deseo inconsciente de comenzar a grabarme realizando este tipo de cante. Además de divertirme mientras lo hacía, me sorprendí a mí mismo al ver el vídeo porque descubrí la posibilidad de crear, en una exposición en la que yo no era el artista. Minutos después, sin ningún sonido de fondo, hice este cante frente a varias obras de arte. Esto sucedió días antes de viajar a Roma, donde continué haciendo las grabaciones de la performance en diferentes lugares como iglesias, calles, parques, universidades, monumentos, galerías y museos, y así, la propuesta se fue consolidando.

Cuando acciono en un museo o una sala de exposiciones, experimento una curiosa emoción al ver que mi arte penetra en la institución sin estar incluido en su programación cultural. Esto me lleva a vivir una conexión conmigo mismo al observar la forma en que el sonido se expande, inunda el espacio, reverbera y vuelve a mí. Esta experiencia implica un movimiento y localizar un espacio adecuado, espacio en el que me siento en comunicación con los seres u objetos que hay alrededor, y otras veces lo trasciendo durante los segundos en los que estoy cantando.
Además, pienso que primero fue el sonido y después las palabras, por lo tanto mientras canto siento que estoy creando sin límites.

No me preparo, llego, estoy en el sitio y lo veo claro.
Con las tomas de vídeo se descubre otra forma de recordar los lugares.

También el proceso creativo de esta performance me ha hecho relacionarme con personas con las que quizá no me hubiera relacionado, en alguna ocasión he puesto el móvil a grabar en la calle y las personas que van caminando mueven el móvil o lo cogen. También me ha hecho conocer mejor los espacios, cuando voy a hacer un ‘cantaraveus’, me detengo, observo lo que tengo a mi alrededor, es un momento de pausa en el que se pueden apreciar detalles que normalmente pasarían desapercibidos.

#cantaraveus